Música y retórica: discurso y sonidos.

La influencia del arte oratorio en la música es la retórica, típica de la época barroca (siglos XVI - XVIII). En estos tiempos, incluso la doctrina de la retórica musical surge, representando la música como una analogía directa al arte de la elocuencia.

Retórica musical

Las tres tareas expresadas por la retórica en la antigüedad (persuadir, deleitar, excitar) resucitan en el arte del Barroco y se convierten en la principal fuerza organizadora del proceso creativo. En cuanto a un orador clásico, lo más importante fue la formación de una cierta reacción emocional del público ante su actuación, por lo que para un músico barroco fue principalmente lograr el máximo impacto en los sentimientos del público.

En la música de estilo barroco, el cantante solista y el instrumentista de concierto ocupan el lugar de un orador en el escenario. El discurso musical busca imitar disputas retóricas, conversaciones y diálogos. El concierto instrumental, por ejemplo, se entendió como una especie de competencia entre el solista y la orquesta, con el objetivo de revelar al público las posibilidades de ambas partes.

En el siglo XVII. Los vocalistas y violinistas comenzaron a desempeñar el papel principal en el escenario, para el repertorio de géneros como la sonata y un gran concierto (gorcet, basado en la alternancia de toda la orquesta y el grupo de solistas).

Figuras retóricas musicales.

Los giros estilísticos sostenidos son característicos de la retórica, que hacen que una declaración oratoria sea especialmente expresiva, mejorando enormemente su impacto figurativo y emocional. Ciertas fórmulas de sonido (figuras musicales y retóricas) aparecen en la música de la época barroca, con la intención de expresar diversos sentimientos e ideas. La mayoría de ellos recibieron los nombres latinos de sus prototipos retóricos. Las figuras contribuyeron al impacto expresivo de las creaciones musicales, proporcionaron las obras instrumentales y vocales de plenitud semántica y figurativa.

Por ejemplo subiendo segundo creó un sentido de la pregunta, y, combinado segundos descendentes por paresExpresado suspiro, duelo. Haciendo una pausa Podría pintar una sensación de sorpresa, duda, imitar el habla intermitente.

Técnicas retóricas en las obras de I.S. Baha

Las obras del genio JS Bach están profundamente conectadas con la retórica musical. El conocimiento de esta ciencia era importante para el músico de la iglesia. El organista en el culto luterano desempeñó el papel peculiar de un "predicador musical".

En el simbolismo religioso de la misa mayor, I.S. Las figuras retóricas de descenso, ascenso y círculo son muy importantes.

  • Forma de circulo El compositor solicita la glorificación de Dios, la imagen del cielo.
  • Escalas crecientes simbolizan la ascensión, la resurrección, y entonación decreciente Asociado con la muerte, el dolor.
  • Movimientos cromáticos En la melodía, como regla general, se utilizaban para expresar tristeza, sufrimiento. El sentimiento triste crea el tema cromático de la fuga en Fa menor (I. S. Bach "El temperador bien temperado", Volumen I).
  • Ascendente pasar al sexto (la figura es una exclamación) en el tema de Fugues en Do Sharp Major (Bach "CTC" Volume I) transmite alegría alegre.

A principios del siglo XIX. La influencia de la retórica en la música se pierde gradualmente, dando paso a la estética musical.

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